Tanto los azulejos para cocina como los azulejos para baños se encuentran rellenos de una pasta de color blanquecino que, conforme pasa el tiempo, poco a poco se va desgastando. El polvo, la humedad, la grasa y algunas sustancias son las causantes de ese deterioro; los espacios se encuentran poco higiénicos y se incrementan las posibilidades de sufrir reacciones alérgicas.
El azulejo es un material excelente y el más usado en los cuartos de baño y en las cocinas. Por ello, debe saberse cómo hay que proceder para limpiarlos y con qué productos. ¿Cómo pueden volver a quedar relucientes como el primer día? A continuación mostramos las claves.
Qué hacer para que los azulejos estén tan blancos como el primer día
Existen soluciones caseras que, además de algunos productos comerciales, pueden hacer que los azulejos queden siempre como nuevos.
Bicarbonato de sodio
Es uno de los productos más recomendados y el más usado en la limpieza ecológica del hogar en cualquiera de sus espacios. Por sus propiedades quita la mugre que se encuentra pegada en los azulejos y llega a neutralizar la acción de las bacterias.
Debe usarse a razón de media taza (aproximadamente 100 gramos) en agua caliente y un cepillo. Para eliminar la suciedad y dejar las juntas blancas, debe rociarse el agua bicarbonatada por estas y frotarse con el cepillo hasta que vaya saliendo, poco a poco, toda la suciedad.
En aquellos lugares en los que exista más mugre, debe dejarse actuar durante 20 minutos y, posteriormente, enjuagarse la zona con agua y jabón.
Vinagre blanco para los azulejos para baños
El vinagre es un producto multiusos que durante muchos años llegó a tener gran importancia como limpiador natural. Cuenta con cualidades antibacterianas, blanqueadoras y antifúngicas. Por otro lado, neutraliza el olor a humedad y aporta frescor al ambiente. Para usarlo, se requiere:
– Media taza de vinagre blanco.
– Un cuarto de taza de agua tibia.
– Un pulverizador.
Debe combinarse el vinagre con el agua tibia y a continuación verterse la mezcla con la botella en modo de spray. Luego han de rociarse las juntas de los azulejos y dejarse actuar unos 10 minutos. Por último, hay que enjuagar con agua tibia.
Agua con lejía
La lejía es el mejor producto para blanquear muchas zonas del hogar y, de paso, desinfectarlas. Es más agresiva que el resto, siendo una opción ideal para eliminar el moho y las manchas. Para usarla se necesita:
– Medio litro de agua.
– Tres cucharadas de lejía.
– Un cepillo.
Para que los azulejos queden como nuevos, debe diluirse la lejía en medio litro de agua tibia y aplicarse en las juntas de los azulejos con esponja o rociador. Tras ello, hay que dejarle actuar durante cinco minutos y frotar con el cepillo mientras vamos enjuagando a la vez.
Limpiar las juntas es vital para que los azulejos para cocina y para baños queden como el primer día. Saber cuáles son los productos caseros que se pueden utilizar es importante para lograr el efecto de pureza deseado.